Mi día, mi gente
Todos los días hago la misma rutina, me levanto temprano preparo a mi hijo para cuando el bus escolar pase por él. Cuando se ha ido al colegio me preparo yo para salir al trabajo. No tenemos auto por lo que debo salir temprano para que el trafico matutino no retrase mi llegada. Platicaba con mi jefa que siempre me levanto con una sonrisa y le doy besos a mi hijo para despertarlo, nos ha pasado pocas veces que nos hemos despertado tarde porque el despertador de los teléfonos no se ha activado o porque no los escuchamos por lo que debemos despertarnos y correr para que el bus escolar no deje a Sebastián. Pero a pesar de las carreras, siempre le doy la bendición a mi hijo, un beso y un te amo antes de salir de casa y él todos los días sale de casa con una sonrisa. Y es eso lo que no quiero que olvide nunca, una sonrisa le da luz al día mas oscuro de cualquier persona inclusive al de uno mismo. Camino todos los días desde la Avenida Reforma hasta la diagonal 6 en zona 10, y
